A la opinión pública

La comunidad universitaria de la UACM ha sido agredida cobardemente, ofendida y humillada por un poder político procaz en su impunidad. Repetidamente, una tras otra vez. En videos que son hoy del dominio público puede observarse como, en la más reciente incursión en contra de instalaciones universitarias, mercenarios entrenados y organizados atacaron y aterrorizaron a estudiantes y trabajadores, blandiendo tubos de hierro. Lo que no quedó registrado, porque la mayoría de los videos fueron robados por los mismos delincuentes, es que algunos de los agresores portaban además armas de fuego, y que propinaron salvajes golpizas a varias autoridades de la universidad.  Pero esto es sólo el punto más alto de una campaña terrorista de casi dos años de duración, que ha sido apoyada por los denuestos y las calumnias de un perioódico de circulación nacional, La Jornada.
Ante esta agresión desmedida e injustificable en contra de una institución de educación superior, el Gobierno del Distrito Federal se ha negado repetidamente a proporcionar a los miembros de la comunidad de la UACM la protección a la que por ley tenemos derecho, como ciudadanos mexicanos.
Antes bien, hemos recibido la befa del Subsecretario de Gobierno del GDF, Juan José García Ochoa, quien ha declarado que "se estará al pendiente de que no haya agresiones" y que "se buscará una salida pacífica y negociada al conflicto."
Por otra parte, el Comisionado para los Derechos Humanos del Distrito Federal, Luis Armando González Plascencia, no sólo se ha negado a recibir nuestras quejas, sino que ha apoyado descaradamente a los agresores, declarando oficialmente que la Rectora Dra. María  Esther Orozco Orozco viola el derecho a la educación de los estudiantes de la UACM, responsabilizándola directamente de la toma ilegal de las instalaciones.
Ambos sujetos de marras, corruptos funcionarios capitalinos, son por lo menos cómplices por omisión de las agresiones en contra de nuestra comunidad.
Otro tanto puede decirse del Secretario de Educación del GDF, Salvador Martínez della Rocca, quién ha declarado que de ninguna manera se recurrirá a la fuerza pública para salvaguardar los derechos constitucionales de los agredidos.
Ahora, la Asamblea Legislativa del Distrito Federal ha forzado a la Dra. Ororzco Orozco y al Secretario de Organización del Tercer Consejo Universitario de la UACM a negociar con los delincuentes agresores. En este ambiente, las legisladoras Yuriri Ayala Zuñiga (educación) y Cipactli Dinorah Pizano Osorio (derechos humanos) presionan a la UACM para que acepte componendas repugnantes y deshonrosas.
Es bien sabido que las mencionadas legisladoras son operadoras políticas del delincuente procesado René Bejarano, quien ha acumulado un enorme poder político mediante el uso de grupos de choque como los que asaltaron el edificio de oficinas administrativas de la  UACM.